Aplauso al talento

Miradas despectivas, risas burlonas y la sorpresa tras la primera apariencia definen lo que precede.
La escena se dibuja así: dos hombres y una dama tras un pupitre. Detrás un centenar más de personas en platea. Frente a ellos una mujer. En el escenario no falta nada para el show: luces, cámaras y millones al otro lado del televisor.

Los programas de talentos suelen ser la esperanza de popularidad de los artistas anónimos, muchos poseedores de talento otros solo de osadía. Recuerdo las versiones argentinas y españolas de Gran Hermano y Operación Triunfo, actualmente en un combo dos en uno en pantallas de Canal 4.

Esta semana la versión de la BBC de Talento tuvo picos de rating inimaginados. Una audición literalmente dio la vuelta al mundo de la mano de Susan Boyle.

Este mujer reúne todas las condiciones para “no simpatizar” pero sí para sumar puntos de audiencia en un programa de estas características. Gorda, desprolija, cuarentona, fea y además desocupada. Susan Boyle nació en Escocia, donde vive sola junto a su gato Pebbles. Un error de comunicación entre la producción, una buena estrategia de marketing u otro infortunio impidió que los productores comunicaran a los jurados del programa los prodigios escondidos tras su apariencia.

Ellos la vieron en escena. Tímida, una pequeña sonrisa esbozando en su rostro. La cámara capturó las miradas despectivas y las risas burlonas de los dos hombres y la dama tras el escritorio de las XXX, además de las reacciones del público presente.

En el escenario lleno de luces Boyle espera, y luego empieza a cantar. La perfección de su arte, que no admitió una imperfección, fue tal que todos los presentes debieron tragarse sus socarronas impresiones.

Esta semana Susan Boyle fue conocida por millones de personas, ya es invitada especial de programas de televisión en varios países y no es difícil pronosticarle un futuro prominente. Tampoco es difícil imaginar cuán diferentes serán las próximas apariciones de Boyle en televisión. Ella seguirá siendo cuarentona y fea. Pero será famosa y aceptada mediáticamente.

Lo que Boyle coseche es mérito propio, a costa de dejarse burlar y mantenerse entera para poder mostrar su potencial. En el video se la ve segura de sí misma espera a que todos dejen de lado su primera impresión sobre ella y atiendan su hermosa voz.

Lo cruel de estos programas es que no suelen tener este final feliz. Decenas de veces son niños y jóvenes que ponen su deseo de fama ante la determinación de un jurado que, evidentemente a primera vista no solo evalúa su potencial como artista, sino su presencia. Sin ir lejos, una joven uruguaya que participó de Operación Triunfo y fue “expulsada de la casa”, confesó en una entrevista a Sábado Show que le da vergüenza caminar por las calles de su barrio.

Susan Boyle no se permitió ni un mínimo error, por eso quizás se dibujó un futuro diferente. Otro debió ser el cantar si cometiendo alguna imperfección los jurados hubiesen tenido que evaluarla en su totalidad. Un paquete que incluía una maravillosa voz, pero que venía acompañada de la edad “incorrecta” y la presencia “inadecuada”. Algo difícil de hacer encajar en un mundo que exige belleza, juventud, delgadez y buena presencia. Un mundo difícil de aceptar.
Vea la perfomance de Susan Boyle en Talento
Por Yelly Barrios

Prensa, cine y compromiso social

María tiene 12 años, es pobre. Inés de 15 también lo es. Nacieron en diferentes lugares, crecieron con disímiles realidades, sin embargo un ámbito común las llevó a encontrarse en un sitio donde lejos de la ficción hay cientos de miles de niñas, niños y adolescentes que padecen la necesidad de tomar un camino que no eligieron: la prostitución.

Narrada con una frescura únicamente marcada por el inocente despertar a la pubertad, “Anjos do sol” devela con magnífica sutileza los sórdidos destinos de las niñas y niños que crecen en la pobreza. Sin educación, sin referentes, sin soluciones, sus padres las venden como ganado a cambio de dinero y un prometido futuro mejor, que no llega jamás.

Un círculo vicioso en el que la muerte, la enfermedad y el abuso son moneda corriente, lleva a la protagonista (Fernanda Carvalho) a descubrir su sexualidad a golpes y a prepotencia.

Las descripciones de los lugares donde son ofrecidas a los pobladores son anecdóticas, cotejadas con la terrible experiencia de descubrirse al sexo, violentada por hombres de toda edad y calaña. Sin escrúpulos se les promete techo, comida y perfumes a cambio de su cuerpo apenas desarrollado, con pechos que se esbozan tímidos y un rostro que es el de una niña en crecimiento.

La historia transcurre. Las escenas más terribles son esbozadas con esplendor. Una puerta que se cierra de golpe esconde una violación; una mirada y un abrazo el horror de sentirse “sucia y machucada” en la entrepierna.

El trabajo del director Rudi Lagermann previo al rodaje se refleja en cada escena. Fueron seis meses de ensayo con actrices jóvenes, muchas de ellas vírgenes, que lograron ponerse en la piel de otras, iguales en edad, pero muy diversas en experiencia de vida.

El cineasta analizó durante tiempo investigaciones periodísticas sobre la prostitución infantil en Brasil. La denuncia de los medios de comunicación, los datos reales de la trata de niños y niñas, las estadísticas frías, las fotografías de casos reales llenaron el guión de este film que es fiel a una realidad que se reproduce en todos los rincones, y que solo la creatividad y el compromiso social pueden convertir en un material de educación, denuncia y arte. (Sitio oficial: http://anjosdosol.com.br/ )
Por Yelly Barrios

Anjos do sol

Maurice Jarre


El 22 de diciembre de 1965 se estrenó en Estados Unidos, Dr. Zhivago. Un elenco de primera línea con Omar Shariff y Julie Christie a la cabeza, llevaron al éxito la majestuosa obra del cineasta David Lean.

Digna representante de una época de esplendor del cine en Hollywood, Dr. Zhivago logró alcanzar la admiración del público y la distinción de la Academia, que le otorgó cinco premios Oscar. Uno de ellos a Mejor Banda Sonora Original, por la composición de Maurice Jarre.

El talentoso artista francés falleció el pasado 29 de marzo. En su haber quedarán vivas por siempre piezas musicales de las más diversas películas. Entre tantas se encuentran “Sunshine”, “Caminando por las nubes”, “Ghost”, “La sociedad de los poetas muertos” y “Atracción fatal”.

Las mil y una "Fridas"

Parece que a Frida Kahlo se le dio por pintar después de muerta: y no lo dudo. En el plano de las infinitas posibilidades todo puede ser. Más en una mujer que no escatimó recursos para vivir al filo; como en un pretil a punto de saltar para caer al vacío o para volar.
Hace unos cuantos años atrás, más de diez quizás, descubrí un universo en un espacio. Un millón de colores en una tonalidad, la inmensidad en una flor o en una cinta, la pasión en un cuadro.

Eso es lo que recuerdo al pensar en la primera impresión que tuve al estar frente a frente con una reproducción de Frida Kahlo. La más apasionada mujer del siglo XX. O al menos la más tristemente apasionada que decidí admirar.

Fascinada por su valor a la hora de desgarrar sus dramas más íntimos y ponerlos ante sí, no pude más que estudiar su paso por el arte, y adentrarme en sus vísceras. O al menos intentarlo.

Un poco más cerca en el tiempo, curiosa y deseosa me encontré frente a frente con Frida por Frida en Buenos Aires. Sin pensarlo repaso la claridad de las pinceladas sencillas y firmes con las que se auto-retrató. Su mirada fija, con un dejo de tristeza, una pizca de alegría y un retoque de amargor desnuda a quien la ve. Ilumina el espacio donde se la encuentra y llena de contexto una historia que se hace carne en cada lienzo.

Si es que efectivamente Frida en vida pudo dedicarle tanta pasión con sangre y sudor a su pintura, por qué dudar, al menos en el plano de la imaginación colectiva, que después de muerta no mueve hilos invisibles de otros artistas.

En México se informó recientemente de la existencia de unos 400 cuadros falsos de la artista. Expertos del país azteca aseguraron que las obras reveladas recientemente como “inéditas” no son más que fraudulentas copias.

El director del Museo Frida Kahlo en México, Carlos Phillips Olmedo, y Teresa del Conde, investigadora del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), sostienen con tesón esta teoría, informó la agencia de noticias EFE.

Atónitos con las sorpresivas apariciones de cuadros de la artista los estudiosos organizaron una rueda de prensa. En la instancia Olmedo señaló que existe un "bajomundo” de obras no reconocidas de Frida que tiene un largo historial. Aseguró, siguiendo la primera hipótesis ya esbozada, que “que Frida está produciendo más muerta que viva”.
Por Yelly Barrios